Nos despertamos esta mañana con las filtraciones de los informes y conversaciones de los servicios secretos estadounidenses. Que de unos servicios secretos que se suponen tan sofisticados y que tienen en sus manos información que teóricamente puede afectar a la seguridad internacional, se produzcan filtraciones, produce inquietud y desazón, lejos de proporcionarnos seguridad, esta situación convierte a los servicios de “inteligencia” norteamericanos en una razón más de inseguridad.
Otro tema, además bastante descorazonador, es la imagen que transmiten dichos documentos de los líderes mundiales. No quiero pecar de inmodestia, pero os lo aseguro, no me ha sorprendido ninguno. Pobre, pobre lleva la política internacional ya muchos años, no es de ahora. La política espectáculo ya hizo en los años ochenta que Reagan fuera presidente de USA, este tipo de política tardó algo más en llegar a Europa, pero llegó y aquí la tenemos, compitiendo por audiencias, como Telecinco y Antena 3 con Belén Esteban. La política, tal como la entienden muchos ahora, se ha convertido en el mercado del voto. No se hace lo que se hace porque se crea que es lo mejor para la ciudadanía, sino porque parece que va a caer mejor en la opinión pública y por tanto dará más votos a corto plazo. Desde ese punto de vista, tampoco es necesario tener en los puestos de responsabilidad a las personas más preparadas o más idóneas, sino a aquellas más mediáticas, con más gancho.
Puede pareceros que estoy criticando a la clase política, pues no, estoy criticando a cada uno de los ciudadanos que viviendo en países desarrollados, cultos y con una enorme pluralidad de medios de comunicación votan a los Berlusconis, Putin, Sarkozies, Carla Bruni incluida ¿como no?, y otros Terminator.
Parece mentira que esta ralea de personajes gobiernen el mundo, parece mentira que sea el voto libre y consciente de ciudadanos, supuestamente cultos y mayores de edad, el que les de un poder que no saben, ni son dignos de manejar.
Se diga lo que se diga, con todos los déficits que tiene la política española, que son muchos, nuestros políticos, que también han bajado mucho el nivel con respecto a los Felipe González, Alfonso Guerra, Abril Martorell, Adolfo Suárez, etc, son bastante mas dignos que muchos de los que veo en Europa y USA.
Aun así hay que despertar, vamos para atrás a pasos agigantados, aun somos más dignos pero corremos raudos y veloces hacia el modelo arriba descrito. Prueba evidente de ello, las elecciones y la política catalana en general. Ha ganado contundentemente CIU, han retrocedido clamorosamente los partidos miembros del tripartito. A mí, como es lógico me preocupa lo que le pase al PSC, estoy lejos, no manejo la información de primera mano, pero la impresión que me da es que jugamos a ser nacionalistas, por lo del voto a corto plazo, cuando nuestro discurso, el de los socialistas, es el de la igualdad, la justicia, la solidaridad, los servicios públicos que garanticen una sociedad con esos valores, el reparto justo de la riqueza, el reparto justo del esfuerzo…Sin embargo nos hemos centrado en discursos identitarios acompañados, dicho sea de paso de un partido, ERC, que ha demostrado inconsciencia, irresponsabilidad y mucha frivolidad en el uso del poder. Me cuentan que el balance de gestión desde la evaluación de las políticas públicas es muy bueno, pero que la política de comunicación ha sido mala. Peor me lo ponen, o sea que hacemos políticas acertadas desde el punto de vista de la justicia social, pero hablamos de identidad, hacemos buenas políticas y nuestros mayores titulares son los que nos ha ido regalando el lumbrera de Carod Rovira. Mal muy mal. Para colmo al final Montilla, que ya lo decía en la entrada anterior, creo que ha hecho una campaña digna, lejos de explicar la obra positiva del tripartito y por qué ahora no era conveniente reeditarlo, reniega de él, como si él no lo hubiera presidido. Montilla ha explicado bien su programa electoral pero no ha sabido zafarse del lastre del tripartito y ha acudido tarde a dar un discurso socialista. Espero que el PSC saque pronto conclusiones positivas y haga aquello en lo que los socialistas creemos y no aquello que creen algunos, equivocadamente, dará más votos a corto plazo. La gente piensa “para nacionalista CIU” Si el propio PSC convence a los ciudadanos de que hay que redefinir la relación con España, que tenemos que buscar encaje, si el problema es de identidad la gente vota CIU, si los problemas de los que se hubiera hablado hubieran sido educación, empleo y sanidad, la ciudadanía hubiera votado socialista.
Esto me lleva a otra reflexión. ¿Puede una campaña electoral de quince días cambiar la percepción construida en la ciudadanía durante cuatro años? Bajo mi punto de vista, claramente no. Si os fijáis los resultados que daban las encuestas al principio de la campaña son muy parecidos a los que al final se han dado. Los esfuerzos de Montilla por hablar de problemas sociales no han servido para nada después de cuatro años hablando de identidad. Lo digo muy claramente, cada vez le veo menos sentido a las campañas electorales, a tanto dinero en carteles, actos públicos, anuncios. Para lo bueno y lo malo se nos juzga por lo que hacemos en cuatro años, de ahí, también, que muchos vivan cuatro años en permanente campaña, o como decía antes tomando medidas de política espectáculo.
Mientras tanto en Lanjarón seguimos, sin prisa pero sin pausa, avanzando hacia el pueblo que nos hemos propuesto construir. La semana pasada se dieron tres hitos importantes:
- Se comenzaron las obras de construcción del Museo de la Miel, proyecto que va a poner en valor nuestro Medioambiente, nuestro paisaje, nuestra historia. Museo que va a dar a Lanjarón un nuevo e interesante atractivo turístico.
- Por otro lado se firmó, por fin, el Convenio del Agua por parte de la Comunidad de Regantes, con presencia del Portavoz del PP en su calidad de miembro de
- Porque supone poner al dialogo como mecanismo fundamental de relación entre las partes firmantes.
- Porque hace que el pueblo participe de los beneficios de la empresa embotelladora en proporción a la evolución de la misma.
- Porque hace del Medioambiente y del desarrollo económico sostenible del municipio su prioridad fundamental de actuación.
Evidentemente, como toda obra humana, seguro que se puede mejorar, pero, sinceramente, creo que hemos puesto unas bases sólidas sobre las que edificar una relación positiva que ha de ir en beneficio de las tres partes firmantes.
- Esta semana hemos tenido Pleno Ordinario, en él aprobamos las bases por las que se regirá el proceso de contratación de la obra del Pabellón Polideportivo Cubierto, un paso muy importante para Lanjarón. No había en este Pleno ningún asunto polémico, solo el mencionado del pabellón y aprobar una moción, del Grupo Socialista, contra la violencia de género. Sin embargo no apareció ningún Concejal del PP y a día de hoy tampoco sabemos a que se debió esa actitud. Ser Concejal es tener la responsabilidad de llevar a los Plenos la voz de los vecinos que nos han votado, es tener la responsabilidad de dar opinión sobre aquellos asuntos que interesan a la ciudadanía, es algo serio, hay que ir, y, si por algún motivo, un grupo cree que tiene que hacer un acto de protesta y ausentarse del Pleno ha de ir, dar los motivos y ausentarse después. En este caso no se ha hecho así, simplemente no fueron y, a posteriori, tampoco han dado explicación pública al respecto, por tanto, no me queda más remedio que pensar que se trata solo de otro más de los muchos gestos de irresponsabilidad que el PP está teniendo en esta legislatura.
Bueno, os dejo, que tengáis una muy buena semana, la verdad que, después de lo leído de los servicios secretos USA, nos la merecemos.
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