Hoy, las redes sociales echan
humo con unas declaraciones de la que fuera hace tiempo ministra socialista de vivienda Maria Antonia Trujillo. Nos viene a decir la señora con respecto a la
ola de desahucios que se están viviendo en España, que “quien tenga deudas que
las pague”, que ella no compra lo que no puede pagar. Estas manifestaciones
denotan, primero, un gran cinismo, las miles de familias que se están viendo
desahuciadas cuando se hipotecaron, lo hicieron porque podían pagar su hipoteca, tenían
trabajo, en la mayoría de los casos los dos miembros del matrimonio, si
embargo, ahora, se encuentran en desempleo y no pueden pagar, pero el desempleo
ha venido con posterioridad a la firma de la hipoteca. En segundo lugar denotan
un enorme grado de ignorancia, porque las hipotecas se firmaron por un valor muy
alto, estaban infladas; pero no pensará esta señora que era el hipotecado el
que las inflaba, no pensará esta señora que el hipotecado quería pagar diez por
una casa que valía cinco. ¿Desconoce la señora Trujillo, habiendo sido ministra
del ramo, que esa sobrevaloración era el beneficio de especuladores que ganaban
millones con solo cambiar la vivienda de nombre, sin hacerle mejora alguna, sin
añadirle valor y sí mucho precio; muchas veces comprando sobre plano y
vendiendo antes de que se terminara la construcción?. Además, ¿olvida la señora
Trujillo que los bancos antes de conceder una hipoteca han de medir el riesgo
de impago que puede haber en esa operación? ¿Quiere decir la señora Trujillo
que los bancos no son en nada responsables de lo que está pasando?
Preocupa, seriamente, comprobar
que alguien con esos déficits ha llegado a ser ministra del gobierno de España,
y la sorpresa es mayor, si pensamos que lo ha sido bajo las siglas del Partido
Socialista Obrero Español.
Pero, como dice el título de este
artículo, a mí no me sorprende. El
Partido Socialista ha gozado de bastante poder en nuestro país en estos treinta
años de democracia, los ciudadanos nos han confiado el gobierno de muchos
Ayuntamientos, de bastantes Comunidades Autónomas, de Diputaciones y durante 21
años del Gobierno Central. A este calor se acercaron a nosotros algunas
personas que lo único que perseguían era el poder, una posición, un buen sueldo,
otros, mejor no nombrar siquiera sus nombres, intereses y tramas que han dado
lugar a sonados casos de corrupción. Todas estas personas, analfabetas en lo
que significa ser socialista, tienen una nula sensibilidad contra la injusticia
y un nulo compromiso con la igualdad como vehículo para alcanzar una verdadera
libertad. Este es el caso, parece ser, de la protagonista de estas líneas.
Si algo tiene de bueno la
oposición es que al no haber estas cuotas de poder, quienes se acercaron buscándolas
acaban por irse, buscan playas mas placenteras, orillas donde sus intereses egoístas
sean mejor satisfechos. Si el período de oposición es largo, veremos mas casos
Trujillos en las filas del PSOE y yo, personalmente, me alegraré de cada uno de
ellos. Siempre es una buena noticia que alguien que no está comprometido con
los valores socialistas lo diga abiertamente.
Los buscadores de poder, aquellos
que vinieron por un puesto, un buen sueldo y una posición de poder, nos han
hecho mucho daño a los socialistas en particular y a los españoles en general.
Aun quedan algunos, pero se acabarán por ir, esto ayudará a que el PSOE vuelva a ser el Partido que siempre ha sido, el que mejor ha
representado a los trabajadores, el que mayores cuotas de igualdad y libertad
les ha dado a los Españoles, el que ha tenido siempre y ha de tener, señora Trujillo, los mayores
niveles de sensibilidad social.
Gracias por la sinceridad señora Trujillo,
ahora entendemos por qué no se cambió la ley hipotecaria cuando gobernaba el
PSOE, usted era la ministra y usted piensa como piensa, ahora lo tenemos,
muchos, un poco mas claro, sin embargo, son muchas las familias cuyo horizonte,
por su forma de pensar y su política, es hoy oscuro, muy oscuro.
Feliz fín de semana a todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario