Sin embargo, a pesar de este
acuerdo, (las obras fueron aprobadas por unanimidad de los dos grupos en el Pleno de 31 de
octubre de 2011); nuestro Alcalde, que es pendenciero por naturaleza y que
además, quien lo diría, necesita, para alimentar su autoestima, la constante
comparación con los demás; una vez finalizadas las obras, nos sale escribiendo
en las redes sociales que él cumple lo que dice, que otros prometieron y no
cumplieron; afirmación esta que le viene muy a medida a quien fue Alcalde
popular durante el período 1999-2007 que no hizo absolutamente nada por este
barrio, que no invirtió un solo euro en él. Aunque no hay que ser muy buen entendedor
para saber que no es a él a quien se refiere nuestro Alcalde, sino que, en su
desconocimiento de nuestra realidad e historia, es a los socialistas a los que
nos reprocha “nuestros incumplimientos con estos vecinos”. Pues bien, veamos
hasta donde es ignorante nuestro Alcalde.
Lo primero que hay que decir es
que las obras realizadas ahora, como se ha dicho mas arriba, fueron aprobadas
en el Pleno de 31 de octubre de 2011, así que han tardado, Eric Escobedo y
Sebastián Pérez, casi tres años en cumplir sus compromisos con este barrio; y
que por mucho que diga en facebook que
este es un barrio de primera, (para mí en Lanjarón no debe de haber barrios de
primera ni de segunda, todos los vecinos tenemos los mismos derechos) no han
sido para poner contenedores de basura soterrados como pusimos los socialistas
en aquellos barrios que arreglamos y que tenían, como este, anchura suficiente
para ponerlos. Día sí, y día también, se me acercan los vecinos quejándose de
los malos olores de los contenedores en este barrio.
Segundo. El arreglo que se ha
hecho ha sido solo parcial, todas las zonas peatonales no se han tocado ¿Por
qué? Porque el Equipo de Gobierno Socialista encabezado por José Antonio Ramos
las arregló durante su mandato.
Tercero. Fue también el equipo de Gobierno socialista
de José Antonio Ramos quien arregló toda la parte de debajo del cementerio; embelleció
esta zona, históricamente olvidada, y construyó una fuente que ya lleva varios
meses rota y que el “cumplidor” de Eric Escobedo no arregla por mas que
los vecinos se lo dicen.
Cuarto. Fue el anterior equipo de
Gobierno, presidido por mí, quien colocó columpios en esa zona para que los
niños de ese barrio tuvieran un lugar de recreo y ocio que no tuvieron mientras
gobernó el PP.
Quinto. Fue también el equipo de
Gobierno anterior, el que dedicó un Plan PROTEJA de la Junta de Andalucía (25.414,48 euros) a poner nuevo el saneamiento
desde la Barriada de la Paz hasta el Puente del Río. (Por cierto, mucho pecho
sacó nuestra actual Alcalde de que él lo había conectado al Museo del Agua,
cosa que, según él, no habíamos hecho los socialistas. Claro, él no sabía que,
cuando los socialistas hicimos el Museo, aun no había saneamiento al que
conectar. Supongo, que tampoco sabía que su predecesor estuvo vertiendo todos
los desechos, desperdicios y productos químicos del matadero, muy contaminantes,
al río porque nunca se preocupó de hacer un saneamiento. En fín, la ignorancia
que es muy atrevida)
Sexto. Fue también el equipo de
Gobierno anterior quien concedió una subvención a los vecinos de la barriada de
la Paz para que pudieran pintar las partes de las fachadas de los edificios que
no son de ladrillo visto. Fue bajo mandato socialista cuando se adecentaron
todos los edificios del barrio.
Séptimo. Pero sobre todo, de lo
que mas orgulloso me siento es que, bajo mi mandato, y por orden mía, el Barrio
de La Paz fue, verdaderamente, de LA PAZ, pues sustituimos el “Yugo y las
flechas” símbolo de una guerra y una dictadura, que costó miles de vidas
inocentes, por una paloma símbolo de paz. Seguro que también hay a quien no le
guste, pero yo estoy tremendamente orgulloso de ello.
Posdata. Una curiosidad, Fijaos
en la línea de arboles que hay en una parte de la acera. Están a un lado para
que puedan pasar sillas de personas con discapacidad o carritos de bebé. Fijaos
donde han puesto los alcorques para los nuevos árboles, en el centro, sin dejar
espacio para que pasen ni las sillas de personas con discapacidad ni carritos
de bebé. Un ejemplo más de cómo está mejorando nuestro pueblo.
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